La Sonrisa Amiga

LA AMISTAD SONRIENTE

Mil sonrisas veo
a través del computador,
es un amiga sonriente
que sonríe con dulzura y amor.

Sonrisas compartidas
de un corazón emocionado
y de una mente en reflexión,
que se toman de la mano,
caminando en amistad,
superando dificultades,
el bajón y la soledad,
alegrando las noches
y la silenciosa tranquilidad.

Como una luna brillante
emite un dulce y suave resplandor
que ilumina tiernamente
uniendo una mente y un corazón
en lazos de amistad.
(24/02/09)

Mirando la lluvia

La lluvia cae con fuerza,
¿será que está llorando el cielo?
¿será una gran emoción,
que le ha hecho derramar lagrimas a montón?

¿Será que se convirtió un pecador
o una hija alejada
ha emprendido el camino
de regreso a Dios?

Miro por la ventana,
veo la lluvia caer,
¿será que el cielo está trizte?,
¿será que está en gran celebración?,
porque un corazón perdido
se reencuentra con su Creador.

Miro por la ventana
y elevo una oración,
por una amiga que sufre
sin poder escuchar tu voz.

Reencuentra, Señor, su corazón,
para que en su cielo
vuelva a brillar el sol,
y florezcan bellas las flores,
en un jardín de esperanza y amor.

La lluvia cae suavemente
¿será que el cielo escuchó mi oración?
Bendito Nuestro Buen y Amante Dios.
(18/02/09)

La voz del Silencio

La voz del silencio

En el murmullo de la soledad
se escucha un bello cantar,
es la melodía del silencio
que entre bruma y frío
comienza a despertar.

¿he de tener yo oídos para escuchar,
para oír todo lo que ha de cantar?
¿Tendré ojos para descubrir
la compañía de la soledad?

Espero que sí los tenga,
que no me vayan a faltar,
no vaya a ser que quede abandonado
en el trizte silencio de la soledad
(27/06/08)

Contemplando el río

Meditando a orillas del Gachaneca

Sentado en una roca
a orillas del Gachaneca,
sumergido en la naturaleza
el correr de agua escuchaba
y el murmullo del viento su cantar elevaba.

El agua que venía bajando,
mojando mis pies continuaba,

rumbo a su destino
sin detenerse hasta su llegada.

Por qué no aprender del agua
que avanza sin detenerse
no hay obstáculo que por más grande
la detenga eternamente,
siempre encontrará un camino
para seguir adelante
hasta al fin perderse
en su búsqueda constante.


 

Contemplado en una roca
el río y el fluir de sus caudales,

mi espíritu volaba,
deslizándose en la rocas,
avanzando con el agua,
buscando su destino,
y encontrando su camino
en su búsqueda callada.
(14/02/09)

La Concurrida Soledad

Caminaba muy seguro
en el mundanal ruido
de la calle Arturo Prat,
que se hallaba silenciosa
en aquel vacilante caminar.

El sol su piel quemaba
sin dejarlo descansar,
pero sin importarle nada,
con su caminar de medianoche
continuaba.

Sin parar,
sin detenerse a descansar,
seguía sentado
en aquel andén tan transitado
por la concurrida soledad.

En aquel andén
que en otro tiempo disfrutó
en el cantar armonioso
del silencio mundanal.

Aunque en aquel tiempo
le acompañaba
una compañía que no era soledad,
pero el tiempo se la llevó
como cuando el viento arrecia
y se lleva las piedras
que vienen y van.

Ahora para él sin ella
el ruido es silencioso
y la compañía soledad.
(29/08/07)

El Reflejo de la Luna

LA LUNA EN LA VENTANA

El reflejo de la luna en una ventana
una noche me regalaron,
eso fue ya hace varios años,
muestra del cariño y del amor
de una amistad que comenzaba.

Después de todo este tiempo,
ese reflejo en esa ventana
no lo he vuelto a observar,
muy lejos están ya el reflejo y la ventana.

Quizás algún día lo vuelva a mirar,
pero aunque no lo volviese a encontrar nunca más,
sé que gozo ahora de una gran amistad,
que a pesar del tiempo y la distancia
no se acabará.
(11/02/09)

MuerTe AmiGa

¡Oh muerte amiga!
Que me pisas continuamente
mis pasos al caminar,
amenazando alcanzarme
y mi vida acabar.

Vienes en mi búsqueda
y nadie me puede esconder
n nadie remplazar.
¡Yo moriré mi muerte!
¡Yo y nadie más!

¿Y qué será de mí?
¿Viviré angustiado la vida que aun tengo
por este fin que me acecha
que es cierto pero indeterminado?
Estoy seguro que vendrás
pero oculto siempre me estará
el momento preciso en que llegarás
a poner fin
a está, mi existencia mortal

Pero acaso por eso
me has de atormentar,
nada de eso
muerte amiga,
fiel compañera de mi caminar,
si vienes hoy,
bienvenida seas,
y si aún tardas en llegar,
no te preocupes,
que yo no me sentaré
como un muerto a esperar,
seguiré viviendo mi vida
hasta que decidas llegar.

Pero quiero que sepas,
tu llegada no me asusta,
pues, ¿qué me ha de asustar?,
¿el dejar de existir y no existir más?,
pues sólo acabarás
con mi más acá.

¡Oh muerte ilusa!,
Que me abres las puertas del más allá,
donde ya no me acompañarás más.

Gracias muerte por tu amistad
y tu gran fidelidad,
por tu infaltable compañía
en todo momento de mi caminar.
Pero te digo para que lo sepas
que cuando al fin llegues a mi vida
nuestra amistad se acabará,
y yo me iré de aquí
sin mirar atrás,
y tú no podrás seguirme
en mi nuevo caminar.

Gracias por tu compañía y amistad

(02/09/07)